jueves, 5 de mayo de 2016

Viajo sola


estado: algunas cosas me cabrean

suena en el soundtrack de mi vida: SPOON - Inside Out



Llevo muchos años viajando y recorriendo el mundo sola. Me declaro adicta a estar sola, perdida y con ansias de descubrir rincones y lugares. Observo, fotografío, escribo, siento, analizo... Un momento especial para mí. Y cuando me siento un poco sola o tengo ganas de socializar siempre puedo conocer a alguien en un hostal. Muchos me llaman loca, inconsciente, otros aventurera. El que nunca ha sentido eso no puede llegar a entenderlo.
Pero no me quiero enrollar hablando de esto. Donde quiero llegar es al momento MUJER SOLA. 

Podría contar miles y miles de historias que me han pasado en mis viajes con respecto a comentarios del sexo opuesto. "Qué haces sola por aquí. No tienes marido. Por qué viajas sola. Tienes que casarte. Está mal visto que a los 29 años no estés casada, el límite es 32, una vez pasas ese límite estás jodida. Tengo un hijo de tu edad y puedo ofrecerte 1K camellos. Hola, cómo te llamas, estás sola. Salgo de trabajar en 2 horas, no tomamos una copa. Te invito a mi casa a toma un café". ¿En serio? Qué necesidad hay de hacernos sentir incómodas. Quién ha determinado que la edad límite de casarse es a las 32 años. Y lo peor de todo es que no entienden el significado de un NO. Que expresa negación. Decir que no a lo que se pretende o se pide, o no concederlo. Por qué me impones a contestarte una preguntan inexistente. Es agotador. A donde quiera que te muevas tiene que haber un hombre lujuriando con ganas de soltar frases incómodas. Que una viaje sola no quiere decir que vas en busca de marido, que eres una desenfrenada y quieres follarte con el primero que te tropiezas. ¿Es que nadie le ha dicho esto a los hombres? ¿Por qué ejercen este tipo de comportamientos? Con qué derecho se imponen y traspasan nuestros límites de espacio corporal. Se sienten con un nivel de superioridad absoluta delante de una mujer. 
Estoy hasta el mismísimo coño de soportar esto cada vez que viajo. Lo peor de todo es que hacen mis días incómodos e inciden en mi comportamiento y formas de actuar, impidiéndome expresarme al máximo. ¿Hasta dónde son capaces de llegar? Ya tuve dos ocasiones incómodas en las cuales tuve que soltar una recta y alguna que otra patada. ¿Pero en serio esto es necesario? ¿Tenemos que resignarnos a soportar esto? Por suerte he tomado algunas clases de defensa personal y hago mucho deporte para mantenerme fuerte y en forma por si tengo que salir corriendo de un posible violador. 

Qué se supone que tenemos que hacer con el resto de imbéciles que ha sido criado así. Esperar que se mueran y que nuestras hijas soporten a sus hijos. Esto nunca va a cambiar si no hacemos algo para cambiarlo nosotras. Con esta entrada me gustaría que otras viajeras compartan sus historias así podremos analizar los comportamientos para defendernos e intentar buscar una solución. 

Calla y vete dicen los sabios. ¡YO NO ME VOY Y ESTOY GRITANDO!


viajo sola

explorando las calles de un lugar
siento cómo me observan, me miran, me desean
me encojo de hombros, esquivo miradas
soporto el dolor de palabras que me arrancan la piel 
se me condensa la ansiedad de soltar una hostia 
sola, evito el conflicto
me hierve la sangre
me gustaría disfrazarme de hombre y enseñarles el clítoris 
destruirles los testículos para que salga el machismo pestilente
que se atribuyen por tenerlos. 
hasta el punto de putrefacción y que sepan lo que es una mujer. 








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